Mihail es rumano, tiene 55 años y está en España desde 2007, donde se ha dedicado eventualmente a recoger fruta. Agazapado tras una caja de electricidad en una calle de Tarragona, extrae precipitadamente de la mochila un documento de la Seguridad Social para demostrar que le falta un día cotizado para poder cobrar el paro. En los distintos trabajos que ha desempeñado le han contratado menos días de los que realmente ha cumplido. Es jueves y el lunes tendrá que abandonar el albergue y vivir en la calle. Pero asegura sin vacilar que no le importa porque ha encontrado una casa abandonada.
Texto y fotografía: ALEC FORSSMANN
¿Por qué viniste a España?
Para buscarme la vida.
¿A qué te has dedicado?
En Rumanía trabajé durante 22 años en una fábrica de juguetes de plástico: mamuts, perros, conejos, pelotas… También muñecos grandes; les ponía las cabezas, el pelo, la ropa…
¿El negocio quebró?
En 1989, después de Ceausescu, el Gobierno era una mafia y robaron de todo.
¿Lo perdiste todo?
Perdí el trabajo. Tengo una casa en Rumanía, pero han entrado a robar y se lo han llevado todo, incluso la madera para hacer fuego.
«Tengo una casa en Rumanía, pero han entrado a robar y se lo han llevado todo, incluso la madera para hacer fuego»
¿Tienes familia?
Con mi primera mujer tuve tres hijas: una está casada en Italia, otra en Alemania y la otra vive en Rumanía. Mi mujer abortó a los tres meses de embarazo y perdimos el cuarto niño.
¿Llegaste solo a España?
Sí, primero estuve en Portugal recogiendo fruta: naranjas, uvas, cerezas, aceitunas… Pero no entendía el idioma y fui a España.
¿Aquí también recogiste fruta?
Trabajé sin papeles recogiendo naranjas en Ontinyent. Sin cobrar.
¿No te pagaron?
No pagan nada. Sólo te dan la comida y el alojamiento.
«He recogido naranjas sin cobrar nada. Sólo te dan la comida y el alojamiento»
¿No tienes papeles?
Sí, he estado de alta en la Seguridad Social desde el 1 de noviembre. Recogí naranjas en Castellón, pero sólo me contrataron dos días al mes, el resto de días no los he podido cotizar. Son todo mafias, una mierda de empresa.
¿Cuánto te pagaban?
La caja de naranjas a 1,30 euros.
¿Cuántas llenabas al día?
Bueno, trabajábamos quince personas juntas. Unos 700 ó 800 euros al mes.
¿Y ahora qué vas a hacer?
Me iré a Rumanía, pero en tres meses volveré para firmar unos papeles.
¿Estás viviendo en la calle?
Estoy en un albergue hasta el domingo. El lunes a la calle, pero no pasa nada, conozco un sitio, una casa abandonada.